Muchas partes de África carecen de tecnología de vigilancia aérea y no pueden ver las aeronaves en sus cielos.
Al igual que todos pagamos peajes por utilizar las carreteras, los usuarios de aviones pagan tasas por utilizar el espacio aéreo de un país.
Al ser un país sin salida al mar, la puerta de entrada a Sudán del Sur está en su cielo.